11 enero 2006

Villabona no trasladará de módulo a las transexuales porque no están operadas


LA NUEVA ESPAÑA
EDITORIAL PRENSA ASTURIANA
Director: Isidoro Nicieza
ASTURIAS

Villabona no trasladará de módulo a las transexuales porque no están operadas

Otra presa, que sí fue intervenida, está internada en el área sólo para mujeresOviedo, I. RONZÓN La prisión de Villabona mantendrá en módulos de hombres a las cuatro presas transexuales, que reivindican su condición de mujer y que piden su traslado al departamento femenino, mientras no se sometan a una operación de cambio de sexo, según explicaron fuentes de Instituciones Penitenciarias. Las mismas fuentes precisaron, literalmente, que las cuatro internas, que en los archivos de la cárcel asturiana figuran con nombres masculinos, no pueden ser trasladadas de ninguna manera al módulo X -ocupado exclusivamente por internas- porque «tienen pene», tal y como se refleja en el informe médico que se realizó sobre ellas tras un reconocimiento. María Jesús Lastra, Elián Paredes, Cindy Carballido y Fany Suárez -son sus nombres femeninos- son las reclusas que reivindican un cambio en su situación penitenciaria. Una de ellas, Fany, llegó a iniciar una huelga de hambre para denunciar tanto su situación como la de sus compañeras en el interior del centro, aunque fuentes penitenciarias señalaron que hace unos diez días que la ha finalizado. El único motivo alegado por Prisiones para no cambiar a las cuatro presas de módulo es que por el momento ninguna de ellas se ha sometido a una operación de cambio de sexo. De hecho, la cárcel asturiana mantiene recluida en el módulo X a una mujer, P. -antes hombre-, que sí pasó por el quirófano y para la que, por esta circunstancia, no hubo ningún impedimento para internarla en el departamento de mujeres, explicaron las mismas fuentes. La interna lleva varios meses en el módulo X, donde ingresó directamente, al llegar a Villabona y pasar el reconocimiento médico. Francisco Garrido, portavoz estatal de Los Verdes y diputado en el Congreso adscrito al Grupo parlamentario Socialista, ha remitido una pregunta al Gobierno sobre la situación de las cuatro presas en la que pide que sean trasladadas al módulo de mujeres.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Colectivos y Asociaciones piden solución para la situación de transexuales presas en España





Mª Jesús LASTRA LAMAR es una de las transexuales femeninas que actualmente se encuentra presas en el Centro Penitenciario de Villabona, [Asturias]. Esta presa nos ha hecho llegar una carta en la que también denuncia las condiciones en que estuvo en el Centro Penitenciario de Nanclares de la Oca, durante el pasado mes de julio. Mª Jesús pasó en Langraiz 10 días que fueron, según ella misma declara, “suficiente para ver y observar las vulneraciones de Derechos que se cometen”.

Transexualidad Euskadi-. Su primera denuncia es sobre las condiciones higiénicas de la celda del módulo de ingresos que se le asignó: “una habitación que ni para un perro: el water, servicio se llama en mi tierra, de orina y mierda que se salía por fuera [...] un olor insoportable [...] no se me facilitó ni sábanas ni mantas ni nada. Aunque fue de verano, pasé un frío horrible [...] Tirada en un cacho de esponja que hacía de colchón, que me picaba todo el cuerpo”. En estas condiciones pasó su estancia en Nanclares Mª Jesús, puesto que pese a sus reiteradas peticiones, no se la cambió de celda en ningún momento.

La segunda denuncia es sobre la asistencia sanitaria: ni su tratamiento hormonal ni su medicación habitual le fueron suministradas: “A pesar de llevar aprobado por el Equipo médico del CP Villabona mi tratamiento hormonal [...] lo solicito y en los 10 días que duró mi ingreso en el CP Nanclares no ha venido nadie a darme [...] Por tener asma crónico, solicito los ventolines que estoy tomando y tampoco, es vergonzoso”.

En tercer lugar, el trato de algunos funcionarios. Pese a su condición de transexual femenina, Mª Jesús es tratada en prisión como “varón”, y por lo tanto cacheada por funcionarios masculinos: “Un funcionario, por cierto, con malos modales, me registra con tocamientos por todo el cuerpo [...] todo gritos y chulería”. Mª Jesús y otra compañera transexual en sus mismas condiciones, tenían que usar las duchas colectivas para hombres, por ello “les solicitábamos a los funcionarios que por favor se nos cerrara con llave hasta finalizar de ducharnos y no les daba la gana”. Su resumen del trato recibido es, pues, contundente: “parece más bien que están tratando con animales que con seres humanos”.

Una copia de la carta en la que Mª Jesús nos plantea estas situaciones ha sido entregada el pasado día 20 de diciembre en el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria de Bilbao, con el ánimo de que no se vuelvan a repetir situaciones como la que Mª Jesús tuvo que soportar el pasado julio en Nanclares, y sigue soportando junto con tres compañeras, a día de hoy, en el C.P. de Villabona (Asturias).

Nuestras compañeras transexuales, Mª Jesús LASTRA, Fany SUÁREZ SILES, Cristina MORENO MORENO, basándonos en el incumplimiento total por parte de las Instituciones pertinentes, de las Circulares 0/2000 y 1/2001 de la Dirección General de Instituciones Penitenciarias sobre “Ingresos de internos transexuales”, firmado por el Director General de Instituciones Penitenciarias a día de 12 de Febrero de 2001, que textualmente dice:

“Conforme a lo establecido en el artículo 16 de la Ley Orgánica General Penitenciaria, los internos serán separados en el interior de los establecimientos teniendo en cuenta, con carácter prioritario, los criterios de sexo, edad y antecedentes delictivos y, respecto de los penados, las exigencias del tratamiento.

La Comisión parlamentaria de Política social y empleo del Congreso de los Diputados ha aprobado una proposición no de ley en relación con el derecho de los transexuales a un cambio de sexo y, entre otras cuestiones, insta al gobierno para que desde Instituciones Penitenciaria se emita una instrucción en la que se busquen formulas para que los transexuales a los que no les haya reconocido su cambio de sexo en documento oficial acreditativo de su identidad sean ingresados, en caso de condena por comisión de delito, en la prisión que corresponda según el sexo socialmente reconocido y por el que desarrollan su vida siempre y cuando no se altere el normal funcionamiento del centro receptor.

En consecuencia, para hacer efectivo en el ámbito penitenciario el derecho de los transexuales y el normal funcionamiento que requiere el orden y la seguridad de los centros penitenciarios, se procederá de la manera siguiente:

I.- Al ingreso de una persona cuya apariencia externa corresponda a un sexo distinto al que conste en su documentación oficial:

1. Se efectuará un reconocimiento médico y si coincide su apariencia externa con los caracteres fisiológicos sexuales, será cacheado por funcionarios de igual sexo con independencia de su documentación oficial, dejándose constancia del reconocimiento.

2. Una vez efectuados los exámenes periciales pertinentes se procederá al ingreso de la persona en el centro o departamento que corresponda en función de su identidad sexual aparente, independientemente de su documentación oficial.

II.- Si un interno solicitase someterse voluntariamente a una intervención quirúrgica de cambio de sexo, los servicios médicos del centro penitenciario realizaran las gestiones oportunas ante los servicios públicos de salud correspondientes de manera que el interno pueda recibir el mismo tratamiento que el resto de pacientes de estas características.”

Sobre la protesta concreta acerca de la falta de continuidad de la medicación en el CP de Nanclares de Oca, añadimos que, puesta en contacto la Asociación de Identidad de Género con la Dirección General de Instituciones Penitenciarias, recibió una carta de la Directora General, Dª Mercedes Gallizo Salas, fechada el 23 de mayo de 2005, en la que le decía que “desde esta Dirección General se ha informado al centro penitenciario [de Villabona] que el procedimiento habitual seguido en estos casos es procurar a los interesados la medicación solicitada”.

Las asociaciones abajo firmantes, exigen tanto a la Directora Genera de Instituciones Penitenciarias, Dª Mercedes Gallizo Salas, al próximo Defensor del Pueblo Asturiano, al Ararteko del Pueblo Vasco, al Director del Centro Penitenciario de Nanclares de Oca, al Director del Centro Penitenciario de Villabona (Asturias), así como al Gobierno Español una revisión de carácter urgente por la desigualdad, así como del trato a una persona transexual en el módulo de ingresos del C.P. de Nanclares de Oca y el total desamparo de las tres presas transexuales del Módulo III (masculino) de dicho C.P.

Así mismo exigimos y esperamos igualmente una pronta entrada en vigor de la Ley de Identidad Sexual, para que las personas transexuales puedan beneficiarse de una total y plena igualdad de derechos para con el resto de la ciudadanía, como bien nombró el Presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, en su Discurso de Investidura, y anunció el Ministro de Justicia el 21 de diciembre de 2005, y poder hacer frente así, y acogerse a dicha Ley cualquier persona transexual ingresada en cualesquiera de los Centros Penitenciarios Españoles.

Firman este comunicado.

Carlos Hernández
(Coor. SalHaketa Bizkaia)
SALHAKETA BIZKAIA

Andrea Muñiz Celestino
Presidenta de, TRANSEXUALIDAD-EUSKADI
(Asociación de Transexuales de Euskadi)

Kim Pérez Fernández-Fígares
Presidenta de la Asociación de Identidad de Género
de Andalucía

Ana Txurruka Etxezarreta
Plazandreok
Plataforma Política de Mujeres. Donosita/San Sebastián (Guipúzcoa)

Ana Ureta Basañez
Presidenta de la Asociación de Gays, Lesbianas y Transexuales ALDARTE de Bizkaia.

Ehgam
Euskal Herriko Gay Askapenerako Mugimendua

Koro del Santo y Amando Pavía.
Presidentes de Gehitu (Asociación de Gays y Lesbianas del País Vasco)

Udiarraga García Uribe
Coordinadora de proyectos de Itxarobide: Apoyo e Información a portadores del vih.
Bilbao (Vizcaya)

Gina Serra Insua
ATC libertad
(Asociación de Transexuales, Intersexuales Catalunya)

Andrea Planelles Aparicio
Presidenta de la Fundación para la Identidad de Género
Barcelona

Colectivo ex_dones
Catalunya

Jesús Carcamo Fernández
Presidente de la Asociación GYLDA
Gays y Lesbianas de Aquí (La Rioja)

Marisa Fernández
Presidenta de la Asociación de AMPGIL- RIOJA
(Asociación de padres y madres de gays y lesbianas en La Rioja)

RQTR
Asociación de lesbianas, gays, tansexuales y bisexuales de la Universidad Complutense de Madrid.

Óscar Manuel Escolano Escobar
(Secretario del Colectivo de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales de Alicante)
Asociación DecideT (Alicante)

JereLesGay
Asociación de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales de
Jerez de la Frontera (Cádiz)

Elena Bolaños Baquero
Presidenta del Col.lectiu gai, lesbià, transsexual i bisexual del Camp de Tarragona.

Jorge Martín
Presidente de la Asociación Estatal El Hombre Transexual

Rebeca Rullán Berntson
Presidenta de la Asociación Española de Transexuales (AET-Transexualia

Beatriz Gimeno Reinoso
Presidenta de la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales
(FELGT)

Carla Antonelli
Portavoz Area Transexual de la FELGT / Directora Portal de Información Transexual

Francisco José Cubero Llamas
Presidente de Ben Amics, Agrupació Lesbiana, Gai, Transsexual i Bisexual de les Illes Balears

Josebe Iturrioz
Medeak

Trans_Bitácora - Diario de Información Digital Movimiento TLGB dijo...

Transexualidad y cárcel


Noticia Extraída de ANIA

Mª Jesús Lastra gana en la Audiencia Provincial de Oviedo su derecho a estar en un módulo de mujeres.

Desde la Asociación de Apoyo a Presas y Presos SalHaketa-Bizkaia y Transexualidad-Euskadi, queremos hacer público este comunicado informando sobre la actual situación de la presa transexual Mª Jesús LASTRA LAMAR, en el CP de Villabona (Asturias). Como se ha venido informando en comunicados anteriores, Mª Jesús es una presa transexual que se encontraba cumpliendo condena en el Módulo III (de hombres) de la citada cárcel. Esta situación, contravenía la circular 01/2001 de la DGIP, según la cual las personas tienen que ingresar en los módulos correspondientes a su “identidad sexual aparente”, puesto que el hecho de que Mª Jesús no hubiese sido intervenida quirúrgicamente para completar su cambio de sexo, era la excusa utilizada por la Dirección del centro para mantenerla en un módulo masculino.

Esta situación se prolongó desde febrero del 2005 hasta el pasado 11 de enero, cuando un Auto de la Sección 3ª de la Audiencia Provincial de Oviedo reconoció su derecho a ser ingresada en un módulo acorde con su identidad sexual. Este auto, dice textualmente: “... han de buscarse fórmulas para que los transexuales, a los que no se les haya reconocido su cambio de sexo en documento oficial acreditativo de su identidad, como es el caso de autos, sean ingresados en caso de condena por comisión de delito, en la prisión que corresponda según el SEXO SOCIALMENTE RECONOCIDO Y POR EL QUE DESARROLLAN SU VIDA DE SIEMPRE”.

Es más, sobre el hecho de que Mª Jesús no esté operada, dice que éste no debe ser un factor a tener en cuenta puesto que supondría: “... el agravio comparativo según se haya podido acceder o no a costosas operaciones quirúrgicas, siendo así que precisamente para evitar este tipo de dislates y a instancias de la Comisión Parlamentaria de Política Social y Empleo del Congreso de los Diputados, Instituciones Penitenciarias emitió la Instrucción 01/2001 con la finalidad de hacer efectivo en el ámbito penitenciario el respeto a los derechos de los transexuales”

Es decir, que el Auto de la Audiencia Provincial de Oviedo interpreta la circular 01/2001 en el mismo sentido que Mª Jesús (interpretación que apoyamos muchos colectivos) y no como lo hiciera el Director del CP de Villabona (que fijaba criterios exclusivamente genitales). De hecho, su estancia en el Módulo III de hombres (un módulo con un elevado número de condenados por delitos contra la libertad sexual de las personas y/o malos tratos a mujeres) se hizo muy dura para una persona con sus características identitarias, algo que le afectó negativamente, agravando su trastorno psicológico depresivo.

Igualmente, la propia Mª Jesús nos recuerda que otras transexuales que, como ella, piden su traslado a módulos femeninos, siguen ingresadas en el Módulo III de hombres, como sería el caso de Cristina MORENO MORENO, o como pueda ser el caso de otras presas transexuales o presos transexuales en las distintas cárceles del Estado español.

Es más, el hecho de que Mª Jesús esté ahora en el módulo X (de mujeres) del CP Villabona no ha supuesto el final de su lucha por el reconocimiento de sus derechos individuales: pese a que en el carné de identificación penitenciaria se la reconoce como “Mª Jesús”, se la sigue llamando “Jesús”, como dice en su DNI, y el propio Auto de la Audiencia, tan correcto en su fondo, la trata como “el interno”, manteniendo unas formas que nos recuerdan que el lenguaje jurídico sigue siendo en sumo grado falocrático, ya que no se le reconoce su sexo psicosocial. Es decir, que aunque lo conseguido gracias al Auto de la Audiencia Provincial de Oviedo es un gran paso adelante, la lucha por el reconocimiento de todos los derechos identitarios tanto de Mª Jesús, como de otras muchas personas transexuales (dentro y fuera de prisión, así como en algunos medios de comunicación), sigue abierta.

Anónimo dijo...

Los transexuales presos podrán ingresar en módulos de mujeres

Noticia extraída de El País

Prisiones primará la identidad psíquica por encima de la física o legal

Los transexuales femeninos (personas nacidas biológicamente hombres que transitan hacia mujer) podrán ingresar a partir de ahora en módulos de mujeres aunque no se hayan sometido a una operación de cambio de sexo o conserven oficialmente su nombre de varón. Instituciones Penitenciarias ultima una circular en la que por primera vez se reconoce la "identidad psico-social" de la persona por encima de su sexo de nacimiento.

A día de ayer había 40 transexuales en prisión, todos en tránsito de hombre a mujer y todos ingresados en módulos masculinos. La normativa en vigor -basada en la Ley General Penitenciaria de 1979- no deja otro resquicio. Los funcionarios deben tener en cuenta la "identidad sexual aparente" del recluso -lo que diga el carné de identidad- y dejar al margen otras cuestiones de índole social o psicológico. Desde hace décadas, esta situación viene acarreando graves problemas a las personas con disforia de género -lo que popularmente se conoce por transexualidad- que han llegado a padecer rechazo, acoso y hasta violación por parte de otros reclusos. A finales del año pasado, la directora general de Instituciones Penitenciaria, Mercedes Gallizo, dio órdenes de mejorar la situación de los transexuales presos bajo una premisa fundamental: "Evitar sufrimientos innecesarios".

La nueva circular establece que las personas cuya identidad oficial de sexo no concuerde con su identidad psico-social de género podrán solicitar de Instituciones Penitenciarias ser ingresadas en el módulo correspondiente a su nueva condición, sin que, no obstante, ello suponga la alteración de su identidad jurídica ni fuera ni dentro de prisión. Lo que, en la práctica, la nueva medida persigue es que quien se sienta mujer -no existe constancia de transexuales masculinos encarcelados- y haya vivido como tal en los últimos tiempos sea tratado en consecuencia a su llegada a prisión.

Un año de viaje

Una vez que un interno solicite el ingreso en un módulo distinto al que le correspondería según su identidad oficial, la dirección dispondrá de un mes para emitir un informe médico y otro psico-social del recluso. Se tendrán en cuenta la situación fisiológica y sexual de la persona interesada, así como los procesos de transexualización seguidos en el exterior. Un informe psicológico indagará en la veracidad de la solicitud. Para ello se considerará necesario que la persona transexual haya iniciado su proceso al menos un año antes del ingreso en prisión.

Nunca más tarde de dos meses, el recluso será informado de la decisión de Instituciones Penitenciarias. Si la solicitud es aceptada, la dirección del centro se comprometerá a seguir los criterios de "discriminación positiva" que marca la nueva circular. La persona transexual será entonces trasladada al módulo de mujeres -intentando siempre que sea en el mismo centro penitenciario- y los funcionarios se dirigirán a ella utilizando un nombre adecuado a su identidad de género. Un nuevo nombre que le servirá para su vida cotidiana en prisión pero no para el papeleo oficial. La nueva norma también tiene en cuenta detalles del día a día como la práctica de cacheos, que tendrán que ser electrónicos y en todo caso respetuoso con la identidad de género reconocida.

Hay otro aspecto fundamental en la nueva medida. Los transexuales en prisión no sólo vienen reclamando el respeto de sus compañeros y un tratamiento acorde con su identidad. Muchos de ellos también necesitan, y de forma imperiosa, que su viaje hacia el otro sexo no se vea interrumpido de forma brusca. Hasta ahora, la dispensación de hormonas venía dependiendo en gran medida de la buena voluntad de los médicos de cada centro. La circular puesta en marcha por Mercedes Gallizo (Fotografía superior) entra también en este asunto.

Los reclusos tendrán derecho a acudir a los servicios públicos de transexualización en las mismas condiciones que la ciudadanía, al tiempo que la dirección de la cárcel les garantizará la recepción del tratamiento prescrito por los servicios de salud.

El funcionamiento de la nueva norma será revisado dentro de un año.

Una travesía muy larga

La nueva norma está escrita en papel oficial, pero en ella se ve la letra de la actriz Carla Antonelli, responsable del área transexual del PSOE, y también de Pedro Zerolo, el secretario socialista de Políticas Sociales. "Desde hace bastantes años", explica Carla Antonelli, "se venía pidiendo que las mujeres transexuales estuvieran en el módulo que le correspondía a su verdadera identidad de género, indistintamente de que estuvieran reasignadas de genitales. Lo contrario ocasionaba muchísimos problemas, incluso traumas psicológicos, a personas que estaban en módulos de hombres, sin integración ninguna y siendo acosadas en algunos casos. Al final, en la cárcel cumplían el delito por el que estaban pero además hacían frente a otra condena añadida".

La actriz tiene en su haber una larga lucha en defensa de los derechos de los transexuales. Ya en los años ochenta fue la primera transexual que participó en un documental de televisión. Dice que la circular tiene aún más valor porque "no existe ningún otro país del mundo donde las mujeres transexuales sin reasignar de sexo vayan al módulo de mujeres".

"Y esto es muy importante", añade Carla Antonelli, "porque yo conozco muchas personas transexuales que llevan más de 20 años sin haberse hormonado porque les provoca conflicto con su salud, pero se han hecho todas las cirugías necesarias para adecuar su físico. Otras, en cambio, se han hormonado pero aún no han visitado el quirófano. No siempre el objetivo ni el fin último de las personas transexuales es la reasignación quirúrgica de genitales. Sobre todo en los transexuales masculinos [personas nacidas biológicamente mujer que transitan hacia hombre], porque esa cirugía no está lo suficientemente desarrollada. El viaje termina cuando la persona deja de tener conflicto entre su mente y su cuerpo".

Anónimo dijo...

Caso de Maria Jesús Lastra, una de las primeras voces visibles para derechos trans prisiones

Noticia extraída de Carla Antonelli

María Jesús Lastra entra en el módulo de mujeres pese a conservar los genitales masculinos. Prisiones atiende su reivindicación y primará la identidad de género y no los órganos sexuales.

Voz de Asturias-. Seis de los 1.300 reclusos que hay ingresados en el centro penitenciario de Villabona han declarado abiertamente su condición como transexuales, pero sólo María Jesús Lastra Lamar ha emprendido una batalla en los tribunales de justicia para reclamar su derecho a convivir entre las reclusas. El pasado mes de enero, la interna gijonesa logró un hito en la institución penitenciaria al conseguir el respaldo de la Audiencia Provincial de Oviedo para su traslado al módulo 10, exclusivo de mujeres, a pesar de que no se ha sometido a intervención quirúrgica alguna para operarse los genitales masculinos con los que nació y a que en su carnet de identidad y en todos los documentos oficiales sigue figurando oficialmente como un varón.

Su lucha se ha visto recompensada no sólo con el prurito personal de ver que los funcionarios no podrán retirarle las prendas femeninas ni las pinturas del maquillaje con el que habitualmente sale de la celda, sino que además ha conseguido cambiar la tendencia de Instituciones Penitenciarias en el tratamiento al colectivo transexual.

PROBLEMAS EMOCIONALES La directora de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, está especialmente sensibilizada con este tema. Al parecer, el departamento que dirige está elaborando una circular con la que dará un espaldarazo definitivo a los derechos de los presos transexuales a estar en el módulo que le corresponda a su verdadera identidad de género, independientemente de sus órganos sexuales.

La situación emocional de estas reclusas es compleja. El ejemplo más claro es el de María Jesús Lastra Lamar, que preside en Asturias el colectivo transexual Soy como soy . La interna vive en una perpetua dualidad. Conserva los genitales masculinos, aunque su apariencia externa es más femenina, al haber desarrollado el pecho con el tratamiento hormonal que ha seguido en el centro penitenciario con el apoyo del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria. Su filiación siempre responde al género masculino, tanto en el carnet de identidad como en los documentos oficiales y, por supuesto, en su expediente penitenciario, pero en la práctica convive, a diario, entre las reclusas.

CACHEOS Si la circular de Instituciones Penitenciarias cristaliza y se da traslado a todas las direcciones de las cárceles del país de las nuevas instrucciones, el colectivo transexual habrá logrado que, por primera vez, se prime su identidad psíquica por encima de la física o legal.

El psicólogo de Villabona ya emitió un informe, que fue incorporado a la causa que permitió a la Audiencia Provincial de Oviedo posicionarse a favor del traslado de módulo para Lastra Lamar, donde resalta que la interna presenta un malestar "persistente con su propio sexo, un sentimiento de inadecuación con su rol".

El objetivo de María Jesús Lastra es, a juicio del psicólogo, "parecerse al otro sexo y esa alteración --señala-- le provoca un malestar clínicamente significativo y un deterioro social, laboral o de otras áreas importantes de la actividad del individuo". Además, reconoce que desde un punto de vista "conductual y emocional", la reclusa está más cerca "del género femenino que del masculino".

El auto de la Audiencia Provincial llevó a la dirección del centro penitenciario a dictar una circular destinada a las funcionarias del departamento donde se contemplaba las medidas que debían adoptar a la hora de tratar con la interna y donde pedía que los cacheos a los que tuviera que ser sometida se realizaran únicamente "con medios electrónicos" y nunca de forma manual.

María Jesús Lastra, que ha estado ingresada en Villabona de forma intermitente para cumplir condena por delitos de robo y hurto, ha anunciado ya que apoyará al resto de los presos que quieran secundar su iniciativa en la cárcel asturiana.

MINIFALDA CON LOS HOMBRES

Hace casi una década, María Jesús Lastra aguantaba los insultos y las risas de sus compañeros de módulo que veían, día tras día, cómo emprendía una lucha en solitario con la dirección de Villabona para que no le retiraran las minifaldas con las que trataba de lucir pierna y las pinturas de maquillaje con las que se retocaba la cara y que, en más de una ocasión, le escondieron los propios presos.

Los sucesivos autos dictados por el juzgado de Vigilancia Penitenciaria que le respaldó, primero para que vistiera prendas femeninas siempre y cuando guardaran el suficiente "decoro" y no atentaran contra "el pudor" y más tarde para que pudiera seguir un tratamiento hormonal dentro del centro penitenciario han marcado un hito en la institución penitenciaria.

El pasado mes de enero se convirtió en el primer preso transexual sin operar que lograba ingresar en un módulo exclusivo de mujeres en España